Estoy en casita, esta tarde no hemos salido. Ayer nevó pero no hay ni rastro de la nieve en las calles.
Hoy es tres de abril. Me siento un poco triste porque me gustaría que mi marido entendiera lo importante que es para mí dedicarme a la Traducción a tiempo completo. No lo entiende. Cree que los traductores son unos frikis con mucho timepo libre y nada que aportar, que para eso ya están las aplicaciones de traducción. Pero es mi pasión, no puedo renunciar a ella. Fue casi siempre mi sueño y digo casi siempre porque mi sueño en realidad fue ser médica pero las matemáticas se me daban terriblemente mal y el inglés muy bien, aunque luego me decidí por el alemán.
Aquí en Alemania los católicos malos, los herejes, han perdido la esperanza de cambiar algo de la doctrina de la Iglesia Católica, a Dios gracias y ahora se muestran escépticos.
Está nublado, como casi siempre pero ni nieva ni llueve.
Han retirado la obligación de las mascarillas pero todos la siguen llevando.
Por lo demás, querido blog, todo bien, un poco melancólica por el tema de la playa pero todo bien.
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